- La ministra de Medio Ambiente inaugura el colector sur
de Oviedo y los aliviaderos de la ciudad, y da comienzo
a las obras del emisario terrestre de Aboño, en Gijón
- La inversión en estas infraestructuras de saneamiento y
depuración asciende a cerca de 28 millones de euros
20 ago. 2003.- La ministra de Medio Ambiente, Elvira Rodríguez, destacó hoy el
cumplimiento del compromiso adquirido por el Gobierno con el Ayuntamiento de
Oviedo y el Principado de Asturias “para dotar de una infraestructura que
permita una mejora fundamental del saneamiento de la capital asturiana y de
toda la Comunidad Autónoma”.
Elvira Rodríguez pronunció estas palabras durante la inauguración del colector
sur de Oviedo y de los aliviaderos de las cuencas norte y sur de la ciudad,
actuaciones que han supuesto una inversión superior a los 23 millones de
euros, cofinanciados con fondos europeos, y que se enmarcan en el amplio
programa de saneamiento que el Ministerio de Medio Ambiente está llevando a
cabo en la Comunidad.
En este sentido, la ministra de Medio Ambiente aseguró ser consciente “de las
necesidades de Asturias en materia de saneamiento, ya que este tipo de
infraestructuras están intrínsecamente unidas a la industria, tan importante en
esta región”.
Asimismo, señaló que estas actuaciones están recogidas en el Plan Hidrológico
Nacional que, según recordó, “tiene previstas casi 900 actuaciones de
saneamiento, depuración y control de la calidad de las aguas, pero también
actuaciones de restitución hidrológico-forestal, de regulación, de
abastecimientos urbanos, de acondicionamiento de cauces y de prevención de
avenidas”.
“Las actuaciones de saneamiento y depuración en Oviedo, Gijón y la ría de
Avilés, las obras de mejora del abastecimiento de la zona central de Asturias, el
saneamiento de los ríos Caudal, Nalón y Nora y las restauraciones hidrológicoforestales
en los ríos Nora, Gafo y San Claudio son prueba del trabajo del
Ministerio para solucionar los problemas del agua en Asturias”, apostilló.
SANEAMIENTO DE OVIEDO
El nuevo colector sur de Oviedo, recogido entre las obras del Plan Hidrológico
Nacional para Asturias, sustituye a uno anterior insuficiente y con graves
deterioros estructurales, y permite la separación de las aguas residuales de las
procedentes de las escorrentías de los arroyos gracias a una doble conducción.
Por un lado, las aguas procedentes de los arroyos Rayo, Palais y Cerdeño se
canalizan hasta el río Nora mediante una conducción rectanguar de casi 3
kilómetros de longitud, mientras que las aguas residuales procedentes del
municipio de Oviedo discurren hasta la depuradora de Villapérez a través de una
conducción, también rectangular, de unos 2.300 metros de longitud.
A esta infraestructura se suman los aliviaderos construidos en la cuenca norte y
en la cuenca sur de Oviedo, que permitirán una explotación más eficaz de la
planta depuradora de Villapérez, al retener una parte importante de la carga
contaminante de las aguas residuales que llegan hasta los mismos y regular los
caudales de éstas enviados a la depuradora.
Además, en caso de fuertes lluvias, el aliviadero retiene las primeras aguas que
caen –que suelen ser las más sucias, pues son las que limpian las calles de la
ciudad- y deriva las aguas que rebosan –que ya son limpias- hacia el río Nora.
El aliviadero norte, con 38 metros de longitud y una anchura de 15 metros,
permite un caudal máximo de entrada de 23 metros cúbicos por segundo;
mientras que el aliviadero sur cuenta con una longitud de 51 metros, una
anchura de 30 metros y un caudal máximo de entrada de 68 metros cúbicos por
segundo.
EMISARIO TERRESTRE DE ABOÑO
La visita de la ministra a las infraestructuras de saneamiento del Principado de
Asturias se completó con la colocación de la primera piedra del futuro emisario
terrestre de Aboño, en Gijón, que supone una inversión de 4,5 millones de
euros, cofinanciados con fondos europeos, y un plazo de ejecución de 18
meses.
Con el inicio de estas obras, que se suman a las de la depuradora de La
Reguerona -que la ministra también visitó- y al emisario submarino de Aboño, ya
están en marcha “las tres actuaciones que son necesarias para depurar y verter
en condiciones las aguas residuales de una población equivalente de 330.000
habitantes, de Gijón y su entorno”, señaló la ministra.
El emisario terrestre que ahora da comienzo tiene como finalidad llevar los
caudales procedentes de la futura estación depuradora de La Reguerona hasta
la cabecera del futuro emisario submarino de Aboño.
Construido en hormigón armado, tendrá una longitud de 1,5 kilómetros y un
diámetro de 2 metros, y discurrirá entre la depuradora hasta la explanada de
Aboño atravesando vías de comunicación e instalaciones industriales, por lo que
está prevista la construcción de un cruce subterráneo. La conexión con el
emisario submarino se ubicará en la explanada de Aboño, junto al dique
existente en la zona norte.